Pronosticar ¿arte o ciencia?
Pronosticar es estimar el resultado de un evento atendiendo a las probabilidades de que éste suceda. Este concepto rompe un poco la imagen que habitualmente tenemos de los pronosticadores ya que introducimos la palabra "probabilidad" y desde siempre se asocia el pronóstico con el arte de adivinar el resultado de -por ejemplo- un partido de fútbol.
Sin dejar de un lado el componente de "arte" que tiene cualquier pronóstico (basados en experiencia, conocimiento de los equipos, datos estadísticos de los que disponemos...) hay que hacer especial énfasis en la parte matemática. Y es que el pronóstico no es más que aplicar el concepto de probabilidad.
Probabilidad en %= 100/ cuota
Por ejemplo: en un partido de tenis Federer-Djokovic se paga la victoria del primero a 1,75. Si traducimos esta cuota en términos de probabilidad veremos que la probabilidad que estima la casa de apuestas de la victoria de Federer es del 57,1% (100/1,75). Es decir, Federer ganará 57 veces de cada 100 partidos.
Cuando pronosticamos tenemos que interpretar estos números y estimar si la probabilidad de que suceda un evento (que gane Federer) expresada en porcentaje coincide con nuestra opinión subjetiva. Si creemos que Federer ganará más veces de las que indica la cuota que nos ofrece la casa, entonces es una buena apuesta ya que nuestro pronóstico indica que la cuota es favorable a nuestros intereses.